¿Lo que hoy vivimos es consecuencia de las decisiones que tomamos o de las que no nos atrevimos a tomar?
No sé si será 100% así, pero me encanta reflexionar sobre estas cuestiones que, de alguna manera, nos acercan a nuestros objetivos.
Si me conocés, ya sabés que todo lo llevo al terreno del arte.
Si tuviera que resumir mi 2024, diría que fue un año de muchísimo trabajo y, por ende, de muchísimas decisiones.
Empecé el año con dos exposiciones individuales y una colectiva.
A mitad de año, tuve el placer de que mi primer proyecto de instalación artística fuera seleccionado entre más de 360 propuestas para el concurso 61.° Premio Nacional de Artes Visuales Clever Lara en el Espacio de Arte Contemporáneo (Uruguay).
Después, participé en la primera edición de la feria de arte PA en Montevideo, que reunió a más de 100 artistas en un espacio de venta directa entre el público y nosotros, los artistas.
Para mí, este año significó un gran crecimiento artístico, lo que también implica mucho aprendizaje… y muchas decisiones.
Además, tuve la alegría de acompañar a dos generaciones del "Viaje de la Artista", mi amado programa online por el que ya han pasado 6 generaciones de distintos países como ser Argentina, Colombia, Chile, México y Uruguay.
Y algo que me llenó aún más el corazón fue abrir un espacio exclusivo de mentoría para quienes ya habían recorrido el "Viaje de la Artista" y sentían la necesidad de profundizar en la exploración de su propio lenguaje artístico.
¿Por qué te cuento todo esto?
Porque para cumplir mis objetivos tuve que planificar mi año.
No quedó al azar.
Cada actividad lleva una energía única, y aprender a mirar el año en su totalidad me permitió tomar decisiones con foco y dirección.
¿Eso significa que todo me salió bien?
No, para nada.
Hay varios objetivos que no logré concretar y acciones que salieron muy diferente a lo planificado. Para ponerte un par de ejemplos: un lanzamiento que no prosperó según la inversión prevista y luego el hackeo de mi cuenta.
Obviamente, eso me hizo tambalear, pero no caer.
Porque tengo un plan y una visión hacia dónde quiero ir.
Si caigo, por más que me duela, me levanto.
Y vuelvo a tomar nuevas decisiones.
Como te darás cuenta, no creo en las soluciones mágicas, pero sí en la visión como motor hacia nuestros sueños.
Y no solo eso: creo en el trabajo, la constancia y en dejarnos ayudar por quienes tienen más experiencia (mentores, formadores, docentes, etc.).
Sé que no todos tenemos las mismas posibilidades o realidades, pero también creo que, si realmente queremos avanzar en el camino del arte, lo importante es tomar acción.
Decisiones conscientes que nos acerquen, día a día, a ese sueño que tenemos.
Así es como voy construyendo mi camino, y así es como acompaño a mis alumnas a construir los suyos.
En noviembre comencé a tomar decisiones para ordenar mi 2025.
Faltan 29 días para que termine este año.
¿Vos ya tomaste tus decisiones?
Me encantaría leerte en los comentarios.
Antes de despedirme, quiero contarte una gran noticia: el próximo "Viaje de la Artista 2025" llegará con novedades que te van a encantar.
Si querés estar al tanto, sumate a la lista de espera desde el siguiente botón:
"El viaje de la Artista" es el resultado de años de experimentación, aprendizaje y crecimiento, buscando y recorriendo mi propio viaje creativo como artista.
Un programa online diseñado para quienes desean descubrir su sello personal en la pintura abstracta, conectando con su esencia más profunda para crear obras auténticas, con confianza y claridad.
Aprenderás paso a paso, sin presiones, pero siempre avanzando hacia el arte que realmente deseas crear.
Incluso si nunca antes te atreviste a pintar abstracto. Porque nunca es tarde para comenzar a transformar tu creatividad en algo único, especial y que te haga feliz.
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Qué genial!!
Me encanta leerte!!! Siempre es motor de inspiración 👏